La llegada del verano no solo significa calor, sol y ganas de chapuzón. Para muchos profesionales, también marca el inicio de una de las tareas más importantes (y vigiladas): el mantenimiento higiénico de las piscinas.
Temporada de piscinas 2025, más allá del agua cristalina
A partir de 2025, las exigencias legales y técnicas suben de nivel, con nuevas normativas autonómicas (como el reciente decreto de Madrid de 2024) que ponen el foco en la salud pública, la prevención de riesgos y la calidad del agua.
Este artículo nace con un propósito muy claro: ser una guía técnica real y útil para todos los que gestionan, mantienen o supervisan piscinas de uso público o comunitario. Desde ayuntamientos hasta empresas especializadas, pasando por hoteles, campings o urbanizaciones privadas. Aquí os explicamos lo que debes saber antes de abrir la piscina esta temporada, desde el cumplimiento legal hasta las buenas prácticas de mantenimiento diario.
Y no solo eso. Este contenido enlaza directamente con formación especializada que impartimos en TECOAL, especialmente en nuestros cursos de salud ambiental, claves para estar al día.
Porque hoy más que nunca, tener una piscina abierta al público no es solo una responsabilidad técnica, sino también legal, sanitaria y reputacional. Empezamos.
Normativa vigente para piscinas públicas y privadas en 2025
El marco normativo que regula las piscinas en España en 2025 sigue siendo complejo. Existen leyes nacionales de referencia, como el Real Decreto 742/2013 sobre criterios técnico-sanitarios de las piscinas, pero el desarrollo más específico se deja en manos de las comunidades autónomas, que tienen competencias para establecer requisitos concretos. Esto significa que dependiendo de tu localización, la normativa puede variar (¡y mucho!).
Entre las autonomías más activas en este campo está la Comunidad de Madrid, que ha actualizado su regulación en 2024, adaptándose a nuevas exigencias microbiológicas y reforzando el papel del gestor como figura responsable.
Lo que sí tienen en común todas las normativas es:
- Obligatoriedad de control del agua: análisis de cloro libre residual, pH, turbidez y otros parámetros fisicoquímicos.
- Limpieza y desinfección diaria de zonas húmedas (duchas, vestuarios, playas de piscina).
- Plan de mantenimiento preventivo documentado y actualizado.
- Gestión del riesgo de Legionella en todos los puntos donde pueda proliferar.
- Registro documental de controles, intervenciones, incidencias y analíticas externas.
Y atención: el incumplimiento puede conllevar multas económicas, cierre temporal de la instalación y responsabilidad civil en caso de brotes infecciosos. No basta con tener el agua limpia: hay que demostrar que está controlada y segura.
Claves del nuevo decreto autonómico de Madrid (2024)
Uno de los cambios más importantes para 2025 viene con el nuevo decreto autonómico de piscinas en Madrid, aprobado en 2024. Este decreto refuerza el control preventivo y técnico, obligando a los titulares de piscinas de uso público o comunitario a cumplir con nuevas medidas específicas antes de su apertura.
Entre los puntos destacados:
- Control previo de calidad del agua durante la quincena anterior a la apertura de la piscina.
- Protocolo de autocontrol técnico-sanitario obligatorio (excepto las piscinas de uso privado tipo 3A de comunidades de propietarios de hasta un máximo de 30 viviendas y el resto de piscinas de tipo 3A).
- Control de rutina 2 veces al días, previo a la apertura de la piscina al público y en mitad de la franja horaria de apertura de la piscina.
Este nuevo decreto ha puesto en el radar la necesidad de tener no solo un buen mantenimiento, sino también formación técnica específica. Nuestro curso de mantenimiento de piscinas online es una formación para estar al día de estas obligaciones legales.
Preparación previa a la apertura: qué se exige 15 días antes
Uno de los grandes cambios de cara a 2025 es la obligación de realizar controles previos del agua 15 días antes de la apertura de la piscina. Esta medida busca garantizar que la instalación llegue en condiciones óptimas al inicio de la temporada y evitar sobresaltos de última hora.
¿Qué debe incluir esta preparación?
- Los parámetros establecidos en el Anexo I y Anexo II establecidos en el Real Decreto 742/2013, teniendo que estar disponibles previamente a la apertura de la piscina.
- Control de rutina 2 veces/día y registrados en el modelo indicado.
La clave aquí es la anticipación. Muchos gestores esperan al último momento, pero ahora la normativa exige tener resultados de laboratorio válidos con antelación, lo que implica coordinar con laboratorios acreditados al menos 10 días antes.
Tratamiento del agua: niveles exigidos y controles
Uno de los pilares del mantenimiento de piscinas es el control continuo de la calidad del agua. En 2025, las exigencias en este aspecto se vuelven más estrictas, especialmente para piscinas con gran afluencia o ubicadas en espacios turísticos.
Los parámetros que debes controlar sí o sí:
- Cloro libre residual: entre 0,5 y 2,0 mg/l.
- pH: entre 7,2 y 8,0.
- Cloro combinado: debe estar por debajo de 0,6 mg/l.
- Turbidez: ≤ 5 NTU.
- Temperatura: 24-30ºC, en bañeras de hidromasaje, ≤36ºC.
Esto no es negociable: los datos deben registrarse diariamente, estar disponibles para inspección sanitaria, y formar parte del sistema documental de autocontrol.
Muchos profesionales están apostando por sistemas automáticos de medición y monitorización remota, lo que facilita la gestión y reduce errores humanos. Una herramienta clave para las empresas de mantenimiento profesional.
Además, se exige control de:
- Transparencia.
- Potencial REDOX.
- Tiempo de recirculación.
- Bromo total cuando se utilice bromo como desinfectante.
- Ácido isocianúrico, cuando se utilicen derivados del Ácido tricloroisocianúrico.
- Cualquier otro desinfectante.
- Escherichia coli.
- Pseudominas aeruginosa.
- Legionella spp.
- Humedad relativa.
- Temperatura ambiente.
- CO2.
Prevención de riesgos microbiológicos: Legionella, Pseudomonas y más
Uno de los puntos más críticos en 2025 es la prevención de riesgos microbiológicos, especialmente en instalaciones con duchas colectivas, spas o recirculaciones de agua.
Los microorganismos que más preocupan a las autoridades sanitarias son:
- Legionella pneumophila: asociada a brotes graves en spas, duchas, fuentes ornamentales.
- Pseudomonas aeruginosa: causa infecciones en oído, ojos o piel, especialmente en niños.
- Escherichia coli: marcador de contaminación fecal que puede producir gastroenteritis.
Tu protocolo de mantenimiento debe incluir:
- Desinfección periódica de los circuitos de ducha y agua caliente.
- Limpieza interna de depósitos acumuladores.
- Control de temperatura y cloración en redes de agua sanitaria.
- Toma de muestras y análisis microbiológico mensual o trimestral (según volumen de usuarios).
Consejo por experiencia personal: «se deben prevenir riesgos microbiológicos como Pseudomonas y Legionella en los circuitos de ducha para garantizar la seguridad de los bañistas». Este punto es clave y debe formar parte del plan preventivo de todas las piscinas abiertas al público.
Además, aconsejamos disponer de personal con acreditaciones técnicas es un plus frente a inspecciones, mejora la imagen ante los usuarios y previene sanciones graves.
Buenas prácticas para el mantenimiento continuo durante el verano
Con la piscina ya abierta, empieza lo más exigente: el mantenimiento continuo diario y semanal. Aquí van algunas buenas prácticas imprescindibles:
Mantenimiento
- Medición de cloro, pH y temperatura al menos 2 veces al día.
- Limpieza de canaletas, duchas y rejillas.
- Retirada de hojas, insectos y suciedad flotante.
- Registro completo de parámetros y observaciones.
- Limpieza de filtros y backwash.
- Revisión de niveles de productos químicos.
- Control microbiológico si la normativa lo exige.
- Comprobación del estado del entorno (jardines, mobiliario, accesos).
Todo debe quedar documentado en un libro de registro actualizado, idealmente con soporte digital. Una piscina segura es una piscina monitoreada y mantenida al detalle cada día.
Recomendaciones específicas para hoteles, campings y comunidades
Aunque la normativa es común, cada tipo de instalación tiene particularidades:
Hoteles
- Alta rotación de bañistas, lo que exige control más frecuente.
- Mayores exigencias en estética y percepción del agua.
- Sistemas automatizados de control y dosificación recomendables.
Campings
- Suele haber múltiples piscinas infantiles o temáticas.
- Mayor exposición al entorno natural: hojas, insectos, polvo.
- Dificultades en el control microbiológico si el suministro no es urbano.
Comunidades de vecinos
- Requieren comunicación constante con vecinos y administradores.
- El mantenimiento suele subcontratarse, lo que exige coordinación con empresas externas.
- A menudo se incumple la revisión previa, y se intenta “apagar fuegos” cuando ya es tarde.
Para todos ellos, contar con un responsable técnico formado, con protocolos claros y una planificación realista es el secreto para evitar incidentes, inspecciones o disgustos.
Cumplir, proteger y disfrutar del verano
El mantenimiento de piscinas en 2025 va mucho más allá de tener el agua clara. Es una tarea técnica, sanitaria y legal, que exige planificación, formación y compromiso. Con normativas como la de Madrid elevando el listón, ya no hay margen para la improvisación.
Si gestionas una piscina pública, de hotel, camping o comunidad, necesitas:
- Conocer la normativa vigente en tu autonomía.
- Preparar la piscina con antelación, no el día antes.
- Controlar el agua cada día, con registros fiables.
- Formarte o contar con personal cualificado, como los titulados por TECOAL.
- Y sobre todo: hacer de la piscina un lugar seguro para todos.
Porque el objetivo final no es solo evitar sanciones, sino también proteger la salud de los usuarios y garantizar un verano sin sobresaltos. Además te puede interesar estos servicios de mantenimiento de piscinas homologados para tener todo controlado y listo, para que los usuarios puedan disfrutar sin problema alguno.
Preguntas Frecuentes sobre el mantenimiento higiénico en piscinas (FAQs)
¿Cuál es la normativa vigente para el mantenimiento de piscinas en 2025?
La normativa depende de cada comunidad autónoma, pero en general exige control diario del agua, prevención de Legionella, y un plan de autocontrol técnico-sanitario. En Madrid, se aplica un nuevo decreto desde 2024.
¿Qué análisis debo realizar antes de abrir la piscina en verano?
Debes realizar un análisis físico-químico (cloro, pH, turbidez) y microbiológico (Pseudomonas, E. coli, aerobios) al menos dos semanas antes de la apertura.
¿Cuáles son los valores correctos de cloro y pH en una piscina pública?
- Cloro libre: entre 0,5 y 2,0 mg/l
- pH: entre 7,2 y 8,0
- Cloro combinado: menor de 0,6 mg/l
Estos valores deben medirse al menos dos veces al día.
¿Es obligatorio controlar la Legionella en una piscina?
Solo en caso de vasos con aerosolización y climatizados. El plan de mantenimiento debe incluir medidas preventivas, análisis periódicos y limpieza de depósitos y circuitos.
¿Quién puede hacerse cargo del mantenimiento técnico de una piscina?
Personal cualificado con formación técnica específica. Se recomienda tener acreditación en cursos como los de Tratamiento de Aguas – Piscinas y Legionella, como los que ofrece TECOAL.
¿Qué pasa si no cumplo con la normativa?
Pueden aplicarse sanciones económicas, cierre de la instalación o responsabilidades legales en caso de brotes infecciosos. Tener todo documentado y bajo control es clave para evitar problemas.
