La cultura de seguridad alimentaria es un componente esencial en la gestión de la seguridad alimentaria por parte de la empresa y cada vez cobra más importancia en la legislación y en los sistemas de certificación.
¿Qué es la cultura de seguridad alimentaria?
Se puede definir como el conjunto de actitudes, valores y prácticas de una empresa que están relacionados con la inocuidad de los alimentos y que se transmite directa e indirectamente a sus empleados.
Una acción importante en este tema es el compromiso, hacer lo correcto aunque nadie les vigile.
La cultura de seguridad alimentaria no es solo la disposición de los empleados a cumplir las reglas establecidas en materia de inocuidad alimentaria sino también la actitud de los responsables de la empresa. Por tanto, existe cuando la seguridad y la salud de los consumidores son entendidas y aceptadas como prioridad por toda la organización.
Con la publicación del Reglamento 2021/282 de la comisión de 3 de marzo de 2021, las empresas están sujetas a la obligatoriedad de desarrollar y trabajar este aspecto en su organización.
¿Cómo implantar la cultura de seguridad alimentaria?
Se establece actuando a 3 niveles:
- Las actitudes de las personas: Todos los miembros de la empresa deben estar concienciados de la importancia de la seguridad alimentaria y del papel que tienen en ella. Esto incluye a los que trabajan en la fábrica, los conductores, los limpiadores, directivos…
- El ambiente en el que se trabaja: las condiciones estructurales o de mantenimiento de instalaciones y equipos deben de permitir unas buenas prácticas de manipulación o fabricación que se unirán a la actitud positiva y capacitación que sea intrínseca al trabajador.
- Los procesos y procedimientos con los que se trabaja: los criterios y normas de seguridad alimentaria deben de recogerse de manera clara y simple en los procedimientos de trabajo de cada uno de los procesos, además de estar siempre accesibles a consulta.
¿Por qué es importante tener una cultura de seguridad alimentaria?
Principalmente porque un comportamiento inseguro da como resultado alimentos no seguros y esto puede generar importantes pérdidas económicas sumado posiblemente a la pérdida de confianza del consumidor en el producto y la marca de la empresa.
Sumado a esto, una cultura de seguridad alimentaria sólida dará como resultado un personal más comprometido, proactivo y un negocio más rentable y mejor organizado.
¿Cómo medir la cultura de seguridad alimentaria en una empresa?
La cultura de seguridad alimentaria se refleja a muchos niveles: las instalaciones, el equipamiento, los documentos, la formación…
Pero, ¿se puede medir? La respuesta es sí
Podemos medir la cultura de seguridad a través de 4 categorías diferentes:
- Proactividad:
¿La empresa conoce de dónde provienen sus riesgos para la inocuidad de los alimentos?¿Y los brotes en otras compañías?
¿La empresa está al día de los cambios legislativos y las innovaciones en la industria? ¿Piensa de cara al futuro? - El propósito:
¿En qué medida la seguridad alimentaria es parte de la visión de la empresa?
¿Tiene estrategia para mejorarla?
¿Se marcan objetivos periódicos relacionados con la seguridad alimentaria? - Las personas:
¿Tienen una formación sólida en seguridad alimentaria?
¿Están estas personas concienciadas en la importancia de la seguridad alimentaria y sienten que son parte importante de su trabajo?
¿Saben actuar con autonomía si un punto de control crítico falla?
¿Se les recompensa sus comportamientos positivos en seguridad alimentaria? - Los procesos:
¿Se aplica correctamente el sistema APPCC?
¿Se aplica de manera coherente esta seguridad alimentaria en todos los departamentos?
¿Qué consecuencias puede tener la ausencia de cultura de seguridad alimentaria?
Las principales consecuencias son alimentos no seguros, falta de confianza en el consumidor, sanciones y pérdidas económicas para la empresa.